En el último período, las abejas han sido el centro de atención en todas partes del mundo. Mucho se ha hablado de su debilitamiento a lo largo de los años que les ha llevado a convertirse en una especie a proteger a toda costa. El cambio climático , el uso de pesticidas químicos contaminantes y muchos otros factores han creado un ambiente cada vez menos hospitalario para las abejas que actualmente se encuentran en serias dificultades.
La supervivencia de esta especie está realmente en peligro debido a la escasez de néctar disponible y los continuos y repentinos cambios climáticos. Nuestro mundo está cambiando rápidamente y con él comienzan a surgir los primeros desequilibrios ecosistémicos. Solo en los últimos años, millones de abejas han desaparecido. Hemos sido testigos de la destrucción de colmenas enteras provocada no solo por la escasez de alimentos, sino también por la llegada de depredadores alienígenas de otras áreas geográficas.